Como ya sabéis, a DosViajando nos encanta pasear por parajes naturales y aprovechamos cualquier oportunidad para hacer una caminata. En esta ocasión, volvimos a sacar a Duna (nuestra perra) por los alrededores, y así poder enseñaros, uno de nuestros lugares favoritos: Monte do Viso.
Si te gustan los miradores, en Santiago no encontrarás muchos. La típica idea de ver la ciudad desde lo alto de un rascacielos, mientras te tomas una cerveza, aquí está complicado. Los únicos que tenemos, son las torres de la catedral.
La altura máxima de cualquier edificio son 12 plantas. ¿Cuál es el motivo? Dicen haber una ley que prohíbe cualquier edificio que supere a dicha construcción, la catedral, para así poder verla desde cualquier punto.
Esta preciosa ciudad, está rodeada de cuatro altos montes. Desde ellos, podrás disfrutar, desde sus «balcones», de unas panorámicas de infarto.
Monte Pedroso
Con 461m, protegido de las construcciones y situado hacia el norte. Desde él, tendrás vistas impresionantes de la catedral (pronto os lo enseñaremos).
Monte de Deus
Más bajo que el anterior y un poco más al norte, te permitirá apreciar la zona vieja de la ciudad a diferentes alturas pues posee tres miradores.
Monte da Agrela
Este no lo conocemos (pronto tocará) pero dicen que en días claros se puede apreciar la Illa de Arousa. Ya os contaremos si esto es así.
Pico sacro
Lleno de leyendas, cuevas, pasadizos… Míralo aquí:
Monte do Viso.
A diferencia de los demás, apartado del centro, se encuentra muy cerquita del Monte do Gozo, lugar muy conocido gracias al Camino de Santiago.
A pesar de la buena situación, pasa prácticamente desapercibido para la gente que visita la ciudad.
El Monte do Viso tiene 399 metros de altura y está lleno de aire fresco y puro.
Si coronas su cima, contemplarás una de las mejores vistas de Santiago. En su parte más alta, solo encontrarás un marco o punto geodésico, azotado por el viento y en una de sus laderas, una pequeña mina abandonada. Si quieres buscarla, ponte pantalones largos, los Toxos no perdonan.
La dura subida puedes hacerla desde diferentes puntos, hay varios senderos de tierra y piedras llegan arriba.
Vistas 360º desde el punto geodésico:
En un primer plano está la Cidade da Cultura, un poco más al fondo, Santiago, la catedral, el estadio de futbol y rodeándote… el paisaje natural, Galicia en estado puro.
Te dejamos un vídeo resumen del paseo aquí abajo:
¿Te has quedado con ganas de más?
Si después de la subida, aun te encuentras con fuerzas, te proponemos una pequeña ruta que te llevará hasta el paseo de Aríns.
Nada más bajar del Monte do Viso, por el lado que da al Monte do Gozo, cruza la calle y baja hacia el río.
El río Aríns, en su no muy largo recorrido, se va juntando a otros ríos como el Fonte Estrapuza (nacido en una mina de pirrotita explotada ya en tiempo de los romanos), el Rego de Angrois (entre otros)… hasta llegar al precioso Ulla del que ya hablamos en la anterior entrada.
Toda esta zona, llena de bosques y prados, está surcada por caminos de tierra a lo largo del río que invitan al paseo y al descanso.
Es una zona preciosa por la que andar durante horas.Un lugar muy tranquilo y muy poco transitado. Si vas en silencio y con los cinco sentidos podrás encontrarte diferentes tipos animales:
Y hasta aquí llegamos. Esperamos que os hayan gustado estos dos lugares muy próximos a Santiago y a la vez desconocidos para los visitantes. Si vienes a hacer el camino o simplemente de pasada, deja un par de horas y descubre lo que se esconde en los alrededores de la ciudad. Te encantará.